1- La práctica d ejercicios de relajación y de respiración ayudará a disminuir la pérdida de entusiasmo, de energía, de agotamiento…así como procurarse un suficiente descanso nocturno.
2- Hay que aprender a expresar los propios sentimientos y no reprimirlos o acumularlos, de lo contrario el cansancio puede manifestarse como un síntoma de emociones ocultas.
3- Es aconsejable imponerse un programa moderado de actividades y ejercicios. Por ejemplo correr al aire libre.
4- La dieta debe ser equilibrada y regular. Rica en proteínas ayudará a combatir el cansancio tan propio de la fatiga. Y es necesario reducir el consumo de azúcar y no abusar de los estimulantes como la cafeína, té, chocolates y las bebidas de cola.
5- Es recomendable la incorporación a la alimentación de todo tipo de vitaminas y minerales, en particular de hierro, zinc, potasio, vitamina C y ácido fólico.
6- Darse un descanso. Asumimos cargas de entrenamiento cada vez más duras, por lo general, con el propósito de mejorar más rápidamente nuestros resultados. Pero el cuerpo, y también la mente, no pueden trabajar constantemente. Ambos necesitan un descanso de vez en cuando.
7- Contar con un entrenador. Muchas veces lo que no funciona en tu carrera es que estás demasiado metido en ella. ¿Estás entrenando duro o quizá no tanto?, ¿y si se trata de un exceso de competiciones? Incluso los deportistas de élite caen víctimas de esta trampa.
8- Ante los problemas cotidianos, hay que evitar preocuparse, ocupándose cuanto antes del mismo para zanjar el asunto, o bien aparcarlo con la flema británica, si el momento no es oportuno.
9- Mantener un diario para identificar las horas en las que sientas más energía y utilizarlas para salir a entrenar. Aunque esto no siempre es posible.
10- Pide ayuda a los familiares y amigos. Busca apoyo en grupos de deportistas de la misma especialidad , con tus mismos objetivos, en caso de prescindir de entrenador.