¿ Quieres mejorar tus marcas? Pues tómate un café.
Tan simple como suena aunque con ciertos peros. Empezando por lo bueno, se ha demostrado que los tiempos en distancias largas pueden mejorarse de manera sustancial con la ayuda de la cafeína. Hay que tener en cuenta que es una sustancia que produce cierta adicción y que incluso en ciertas dosis muy elevadas puede suponer doping( 15mg/ml a niveles urinarios), pero en pequeñas cantidades tiene un efecto positivo.
- Cuando te tomas un café tu cuerpo usa una mayor proporción de grasa como forma de energía, desplazando ligeramente el metabolismo, de modo que al final de la carrera aún te quedan hidratos de carbono y es más difícil que tengas algún bajón. En corredores de maratón se han llegado a encontrar diferencias de hasta 10 minutos de mejora, tras la ingesta de cafeína. El café también activa tu sistema nervioso, dándote un poco más de chispa al principio de la carrera, y favoreciendo la arrancada. Además te hace estar más alerta y favorece las tareas en las que se precisa enfocar la atención, de ahí la costumbre también para trabajar.
- En el capítulo de lo negativo, los que tienen cierta tendencia a las taquicardias pueden empeorar su situación con el café. También se ha comprobado que aumenta la tensión arterial, así que no pases de dos tazas al día si tu tensión ya es algo elevada por naturaleza. Otro efecto no deseado es la deshidratación, al ser una sustancia diurética, así que si tomas un café para correr no olvides bebe más, para que tus músculos tengan todo el agua que necesitan. En cualquier caso parece que este problema solo se presenta cuando no estás haciendo ejercicio, pues no se encuentra una deshidratación significativa tras acabar una carrera en la que has tomado cafeína.
- La vida media de la cafeínaoscila entre las 2 y las 12 horas en adultos sanos. El pico máximo de los niveles sanguíneos se observa entre los 30 y 60 minutos.