A lo largo de mi trabajo como entrenador personal, y entrenador de Rendimiento en Atletismo y triatlón, en todos los planes de entrenamiento he ido aplicando todos los factores a tener en cuenta de cualquier disciplina; la fuerza, capacidad aeróbica en todos sus estados, velocidad, potencia, etc. Y siempre he tenido muy en cuenta un factor invisible que es la coordinación, y más concretamente uno de los factores de esa coordinación que es el entrenamiento propioceptivo.
Mis atletas han podido “sufrir” ese tipo de entrenamientos, y podrían dar una opinión de lo que ha significado para ellos. Voy a tratar de explicar de una manera breve y precisa qué es la coordinación y la propiocepción.
¿Qué es la coordinación?.
Constituye la base de todos los movimientos humanos.Y es responsable del aprendizaje, regulación y adaptación de los movimientos. La coordinación también puede ser considerada como el factor central de la capacidad de rendimiento motor. Puesto que su efecto es el que permite que las demás características motoras básicas de la condición física, como la fuerza, la resistencia, la velocidad y la movilidad, puedan ser utilizadas. Cuanto mayor sea la capacidad de coordinación, más económica y precisa será una secuencia motora determinada.
Por tanto entendemos por coordinación la acción conjunta del sistema nervioso central como órgano regulador y de la musculatura esquelética como órgano ejecutor en el transcurso de una secuencia motora determinada y dirigida a la consecución de un objetivo.
Habría que diferenciar entre coordinación intramuscular (desarrollo de la fuerza llevad a cabo dentro de un músculo) y coordinación intermuscular (cuando hagamos referencia a la sincronización de la actividad entre agonistas y los antagonistas implicados en el desarrollo de una secuencia motora determinada).
El fundamento de la coordinación descansa en los siguientes componentes:
– Capacidad de orientación, capacidad de reacción, capacidad de diferenciación, capacidad de acoplamiento, ritmo, equilibrio, capacidad de anticipación y capacidad de adaptación.
Bueno, una vez hemos entendido un poco en líneas generales lo que es la coordinación, viene la gran pregunta:
¿Qué es la propiocepción?
Es uno de los factores de la coordinación. Comprende el equilibrio y la capacidad de adaptación y de reacción. También denominada sensibilidad profunda, la propiocepción permite la orientación del cuerpo en el espacio mediante la percepción de la posición y el movimiento de nuestras articulaciones.
La articulación como unidad básica del aparato locomotor debe:
– mantener una posición determinada con la ayuda de las estructuras de sostén.
– ser capaz de modificar la posición y la postura con la ayuda de las estructuras motrices responsables de que podamos alcanzar el movimiento deseado.
El entrenamiento propioceptivo es lo que comprende el equilibrio y la capacidad de adaptación y de reacción
Los receptores de la propiocepción están situados en músculos, articulaciones, tendones y en la piel.
- Nuestra marcha erguida es posible gracias a la interacción de los sentidos cinestésico y postural. Las informaciones necesarias provienen esencialmente del órgano vestibular ( órgano del equilibrio situado en el oído interno). Estas informaciones son complementadas por el sistema visual y el sistema propioceptivo.
- Cuando tropezamos, por ejemplo, la acción conjunta del órgano vestibular y de los propioceptores desempeñan un papel muy importante. Antes de que la situación sea registrada conscientemente, ya ha tenido lugar una reacción motora opuesta que evita la caída. Puesto que en el oído interno se encuentran los receptores de la aceleración.
Podemos afirmar que la propiocepción forma la base del control motor de forma general y de la capacidad de estabilización reactiva de forma particular.
Por tanto, el entrenamiento propioceptivo es de suma importancia para poder mecanizar y reaccionar de manera inconsciente a diversos estímulos e informaciones que recibimos.
Un entrenamiento propioceptivo significa:
- entrenar, en primer lugar, el equilibrio.
- mejora de la sensibilidad profunda y la actividad muscular refleja que de ella se deriva.
- y hace referencia a aspectos parciales de la coordinación global.
Por ejemplo, en un corredor de maratón:
- el entrenamiento de la propiocepción implica una mejor reacción muscular a los cambios de ritmo, a los cambios de pendiente, a la pisada en diversos terrenos.
- Vamos a reaccionar de una manera inconsciente, y por tanto más rápida a todo tipo de situaciones en una carrera.
CONCLUSIÓN
Puntualizando, he de decir que los trabajos propioceptivos son trabajos de fuerza en un escenario diferente. Realizando una sentadilla o un pres banca también estamos trabajando los receptores propioceptores pero en un escenario diferente. Hemos de saber como trabajar en diferentes escenarios, sabiendo cuál es el estímulo que pretendemos accionar.
Por lo tanto, mi consejo como entrenador personal, es incluir este tipo de entrenamiento propioceptivo a lo largo de toda una temporada.